Mario CASTELLANOS ALCAZAR.
El gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat Hinojosa tuvo que hacer frente al paro de la Policía Estatal Preventiva, que en exigencia de sus demandas laborales permanecieron siete días en paro de actividades, en fin, los demandantes aceptaron los ofrecimientos del gobierno estatal a través de la firma de una minuta, por lo que levantaron su protesta.
Claro, que este problema creció por la falta de atención de los funcionarios de la Secretaría de Seguridad Pública del Gobierno del Estado- del Secretario, Raúl Ernesto Salcedo Rosales, por lo que tuvo que intervenir directamente el Ejecutivo Estatal, valiéndose de dos de sus negociadores de amplia experiencia, estos, son, el Secretario General, Francisco García López y el Secretario de Administración, Germán Espinosa Santibáñez, que, tras cinco mesas de negociación, diálogo y concertación lograron destrabar las demandas de los policías.
Las armas primordiales fueron el diálogo -y por supuesto- que Francisco García López, como encargado de la política interna del gobierno estatal, entregó buenas cuentas al Ejecutivo, primero, porque se logró el entendimiento de la corporación policiaca, entraron al orden, hubo convencimiento- y aunque los ofrecimientos no fueron onerosos- y todo fue de acuerdo con el presupuesto destinado a la seguridad pública, pese a la reducción del fondo y partidas para este rubro por parte del Gobierno Federal, las demandas salieron adelante.
En segundo término, el gobierno estatal, mantuvo a través de los negociadores, la calma y la tolerancia. No se llegó a las provocaciones de los opositores y fuerzas retrogradas, que, por supuesto pretendían que se llegara a la violencia y a la confrontación, incluso, divulgaron que la Guardia Nacional desalojaría con lujo de violencia a los policías estatales que estaban resguardados en el cuartel general de la corporación, hasta donde llegó el Ejecutivo a dialogar con la corporación policiaca, pero el desalojo no sucedió.
En tercer término, los policías aceptaron del gobierno estatal las respuestas a sus demandas resueltas al 100 %. Esto es, en su demanda de aumento salarial del cien por ciento, dijeron que ganan 2 mil 700 pesos a la quincena, al respecto, aceptaron que el incremento salarial se revisará en el pliego del Sindicato de los Trabajadores al Servicio del Estado, que ya está en revisión. Los burócratas no logran más del 4 % al salario directo y 3 en prestaciones.
En el bono alimenticio lograron de 35 pesos diarios que tenían, a 55 pesos, los polis pedían 400 pesos diarios; otro logro fue un bono de 80 mil pesos para el mejor policía del mes, a partir de abril, un aumento al pago del bono disciplinario de 250 a 300 pesos, un bono COVID de 400 pesos a cada uno, un bono por el Día del Padre de 200 pesos, así, también, se les dará mejor atención médica en el Instituto Mexicano del Seguro Social y viáticos oportunos.
En el seguro de vida se contratará nueva póliza para aumentar la indemnización de 400 mil a 500 mil pesos en caso de muerte accidental y de 200 a 250 mil por muerte natural, gastos funerarios de 40 a 50 mil y un bono único de 800 pesos, entre otros.
Respecto a la destitución del Secretario de Seguridad Pública de Oaxaca, Raúl Ernesto Salcedo Rosales, no estuvo a discusión, solo quedó en evidencia y bajo observación por su arrogancia, represión y malos tratos a la corporación policiaca, a cambio, el Ejecutivo del Estado, se reunirá cada mes con la corporación policiaca para conocer y resolver sus peticiones y mejorar el servicio de seguridad.
LO QUE EN REALIDAD DEBE GANAR UN POLICIA ESTATAL
Según estudios de la Secretaria Federal de Seguridad Pública dado a conocer por el ex Secretario, Alfonso Durazo Montaño, un policía estatal a nivel nacional de las 32 entidades del país debe ganar en promedio de 13 mil 187 pesos al mes, se quedó corto, en este aspecto, Tabasco y Oaxaca son los Estados con policías con los más bajos salarios, prestaciones sociales, derechos y servicios.
Los de Tabasco ganan 6 mil 331 pesos mensuales y los de Oaxaca apenas llegan a los 6 mil pesos, es decir, están a la mitad de los sueldos, que en promedio deberían ganar. Esto representa un reto para los gobiernos de los Estados, donde los polis están en las peores condiciones de vida para mejorar salarios y prestaciones sociales, desde luego, con el fin de mejorar el servicio de la seguridad pública.
Por ejemplo, el Estado que mejor paga a sus policías es San Luis Potosí, con 21 mil pesos mensuales y por supuesto, tienen mejores prestaciones sociales, todo indica que aquí hay más disciplina, servicio, orden y mejor seguridad.
El Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, dice, que hay un gran rezago en materia de seguridad en las 32 entidades del país, ya que este personal está muy mal pagado, pero, además, a nivel nacional solamente hay en funciones la mitad de policías de los que realmente debe haber. Hay un déficit.
México cuenta con 128 mil 922 policías estatales en las 32 entidades, luego entonces, se necesitan el doble de esta cifra, cuestión, que se tiene previsto regularizar en cuando menos 5 años, ahora bien, la Organización de las Naciones Unidas dice que el promedio de polis, mínimo debe ser de 2.8 por cada mil habitantes. México tiene la meta de tener 1.8 policías, pero, actualmente tiene apenas el 0.8 policías por cada mil habitantes.
Cada entidad maneja su propia política en cuestión de salarios y prestaciones sociales de sus policías, en lo general, no hay igualdad de condiciones de vida, a los polis se les regatea sus salarios, por eso, los gobiernos estatales, les dan otro tipo de apoyos, como son los bonos por acá y por allá, precisamente porque al sistema no le conviene darles aumentos directos a sus salarios, por lo que debe haber justicia para el gremio policiaco.