Mario CASTELLANOS ALCAZAR.
La incongruencia del gobierno mexicano estriba entre la consulta ciudadana para enjuiciar a los últimos 5 expresidentes de México y la propagación de las variantes del COVID – 19. Hace más por la política y su permanencia en el poder. Soslaya el alto contagio de los mexicanos.
Todo por combatir la corrupción del régimen capitalista y hacer realidad lo prometido en campaña electoral y ya como gobierno. Llegará a las últimas consecuencias, pero está en veremos. Tiene muchas adversidades.
Tal parece que el gobierno de la Cuarta Transformación de México está obstinado en llevar adelante la consabida consulta ciudadana para una nueva acción electoral, el próximo uno de agosto, que pretende el acopio de 38 millones de votos, en favor, del enjuiciamiento a los expresidentes: Carlos Salinas de Gortari (PRI), Ernesto Zedillo Ponce de León (PRI), Vicente Fox (PAN), Felipe Calderón Hinojosa (PAN) y Enrique Peña Nieto (PRI).
Incluso, por encima de la pandemia del COVID- 19, pese al repunte de la tercera ola del padecimiento, que en las últimas semanas ha elevado el número de contagios en las entidades de la República Mexicana.
Si recordamos que los contagios y muertes se han incrementado en altos porcentajes. Hasta el sábado 24 de julio del presente año, que se dieron 15 mil 823 nuevos casos en las últimas 24 horas- y en total suman 238 mil 316 fallecidos. Esto se agudiza con las 24 variantes que ya están presentes en territorio mexicano, afectando a los adolescentes y jóvenes.
Según la Organización Panamericana de Salud (OPS) el incremento semanal del COVID 19 en México es del 29 por ciento- y la variante predominante es la Gamma procedente de Brasil, le sigue Alfa y en tercer lugar la Delta, pero esto no repara al gobierno, que sin ninguna restricción minimiza los contagios y las muertes por la pandemia.
Sí, por encima de la pandemia, predomina el aspecto político del gobierno en turno, pues para este, primero está lo referente a lo electoral, haciendo énfasis a la consulta ciudadana del uno de agosto 2021, convocando a los ciudadanos a que acudan a las urnas que instalará el Instituto Nacional Electoral en el país para que emitan su voto en contra de los expresidentes de México ya señalados por actos de corrupción, saqueo de las arcas públicas y delitos de lesa humanidad, entre otros.
Aunque, contraviene a la política de la austeridad republicana, debido a que la consulta ciudadana costará a la federación más de 500 millones de pesos, que podrían utilizarse para otros rubros, bien, para el combate, prevención y curación de la pandemia.
Aparte de la promoción y propaganda que los organismos afines al Gobierno de la 4T, y por supuesto, del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) están haciendo en las entidades del país, con la participación de la militancia morenista, gobernadores electos y en funciones de este partido en el poder, así, como los senadores, diputados federales y locales, es decir, toda una parafernalia para dicho fin.
El compromiso es recabar 38 millones de votos en favor del enjuiciamiento de los expresidentes, muy por arriba de la votación que obtuvo el actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador- 30 millones de sufragios para llegar a la presidencia.
Solo así, los expresidentes podrán ser vinculados a proceso penal; por demás, se trata de un acto fuera de la ley, debido a que se actúa, políticamente, en una cuestión de tipo netamente jurídico – y no de actos de relumbrón, ni de popularidad para ganar adeptos, en el sentido, de que la justicia es la aplicación de la ley, y no necesita de la consabida consulta ciudadana cuando se cuenta con argumentos y pruebas de los delitos denunciados.
Al respecto el exconsejero del Instituto Nacional Electoral (INE) Marco Antonio Baños Martínez, manifestó, que se trata de un juego político, contaminando de corrupción y fraude, que puede llegar a la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales (FEDE)
Esto, porque en las mesas de información y promoción de la consulta popular, instaladas en la ciudad de México, por los organismos de MORENA, no es necesario, porque, además, los promotores hacen firmar a la gente una hoja que dice: “convencido, por la consulta popular” así como una leyenda: “juicio a expresidentes”. “Es la hora del pueblo”.
¿Las firmas para que’? Según, se entregarán al Instituto Nacional Electoral, como un requisito necesario, pero no, porque la consulta ya está aprobada por dicha institución. Además, piden datos personales: nombre, dirección, número de teléfono, así, como la clave de la credencial de elector. ¿todo esto para qué?
En fin, los sectores de la población- menos los conservadores, sí, esta vez darán su voto en favor del enjuiciamiento a los expresidentes, en apoyo al gobierno de la 4T, es porque va contra los actos de corrupción de los gobiernos neoliberales: PRI, PAN y PRD. Solo que el presidente anti neoliberal debe poner el ejemplo, emitiendo su voto para tal fin, porque dice que no. Solo hará lo que el pueblo diga.
carloscastellanos52@hotmail.com