Mario CASTELLANOS ALCAZAR
Van nueve años de la desaparición forzada y múltiple asesinato de los 43 normalistas de Ayotzinapa- Estado de Guerrero, sin solución, ni esclarecimiento del crimen de los jóvenes masacrados en el sexenio del gobierno de Enrique Peña Nieto (PRI), pero tampoco- hay pistas en el actual gobierno de la Cuarta Transformación, la 4T.
A nueve años- no hay visos de solución. Es un crimen oculto. Es un crimen de Estado- para el actual gobierno de los mexicanos, obstinado en la defensa y protección del Ejército Mexicano, que da por terminado las investigaciones y todo quedó en la tesis de la “Verdad Histórica” del gobierno de Peña Nieto.
Un crimen abominable que conmovió al mundo, hecho historia fallida, corrupción, injusticia, encubrimiento e impunidad del sexenio pasado, pero en el actual régimen, se sigue solapando con fines inconfesables, pues no hay avance, ni nuevas investigaciones- y nula aplicación de la justicia pronta y expedita- que prometió el actual régimen de MORENA.
Todo sigue igual, o peor. El último informe del gobierno de la 4T- a cargo del subsecretario de Derechos Humanos del Gobierno Federal, Alejandro Encinas- se asemeja al de la “Verdad Histórica”- del sexenio pasado- la misma tesis, que indica, que los jóvenes fueron llevados al basurero de Colula en donde fueron incinerados y arrojados al río- y por supuesto- que el presidente parece cerrarse-
Así, los padres de familia de los 43 normalistas de Ayotzinapa tácitamente rompieron relaciones con el gobierno, justo en el noveno aniversario de la desaparición forzada de los normalistas- por el hecho de ocultar la verdad y proteger al Ejército Mexicano, que no se le toca ni con el pétalo de una rosa- y lo grave- es que se trata de criminalizar a los normalistas, por la infiltración de la delincuencia organizada.
Vidulfo Rosales, abogado de los padres de familia, dijo que estos, exigen la transcripción telefónica entre narcos y autoridades- que yacen de los archivos de los militares, pues este documento podría aportar pistas sobre el paradero de los estudiantes de la Normal Isidro Burgos, sin embargo, es ocultado misteriosamente, nadie sabe, nadie supo- la verdad autentica de los hechos.
Mientras tanto, el único testimonio- es el encarcelamiento de quien fuera el Procurador General de la República, Jesús Murillo Karam- en el tiempo de los hechos- apresado en el Reclusorio Norte, luego de haber sido detenido el 20 de agosto del año 2022, responsable de la “Verdad Histórica” para dar carpetazo al expediente de la desaparición de los normalistas.
Mientras sean peras o manzanas- el gobierno actual- no tiene las pruebas necesarias, tampoco el deseo de esclarecer el caso- por lo tanto- sus promesas fueron vanas, pues no- hay indicios de solución- por lo que los padres de los muchachos pierden las esperanzas y las ilusiones que les infundo el gobierno de la 4T, que mal termina su sexenio a menos de un año de que termine su administración.
Parece, no importar, este crimen de los 43 normalistas, pues la prioridad del gobierno es otra, totalmente ajena al caso de Ayotzinapa. Lo que está en puerta es la elección del nuevo presidente, senadores, diputados, nueve gobernadores y autoridades municipales. La atención está ahí- la sucesión presidencial- y la conservación del poder en el partido en el gobierno: MORENA.
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